Pensando sobre la importancia que tiene la cultura, en todas sus definiciones, formas y acepciones, es muy difícil de entender el motivo por el que la propia cultura no tiene un objetivo propio de desarrollo sostenible (ODS). Sin embargo, a pesar de que no tenga su propio ODS, la cultura es un pilar esencial en muchos de ellos para obtener la consecución de los mismos.
La cultura es una fuente de riqueza y bienestar para las personas y las sociedades. Contribuye a la cohesión social, a la inclusión, al diálogo intercultural y a la creatividad e innovación. También es un motor económico, generando empleo y riqueza. Sin embargo, la cultura sigue siendo un área subestimada y marginada en muchas políticas y estrategias de desarrollo, y a menudo se considera un «lujo» en tiempos de crisis.
En 2015 la comunidad internacional adoptó la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, un plan global para erradicar la pobreza, proteger el planeta y garantizar la prosperidad para todos. La Agenda 2030 se compone de 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que abordan los principales desafíos mundiales, desde la pobreza y el hambre hasta la educación y la salud, la igualdad de género y el cambio climático.
¿Qué son los ODS?
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible, son un plan de acción global acordado por los países miembros de las Naciones Unidas en 2015 para erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos. Este plan establece 17 objetivos interconectados y 169 metas para abordar los desafíos sociales, económicos y ambientales más urgentes del mundo.
Los ODS están diseñados para ser universales y aplicables a todos los países, independientemente de su nivel de desarrollo. Los objetivos se centran en temas como la eliminación de la pobreza, la lucha contra el cambio climático, la promoción de la igualdad de género y la mejora de la salud y la educación.
Cada objetivo y meta tiene un plazo límite para su cumplimiento, establecido para el año 2030. Los ODS son una iniciativa ambiciosa y están destinados a guiar el desarrollo sostenible a nivel mundial durante la próxima década y más allá.
La cultura está en el centro de la Agenda 2030, ya que se reconoce su papel clave en el desarrollo sostenible y en la consecución de los ODS. Por esta razón, en 2018 se adoptaron los Objetivos 2030 para la cultura, que son una herramienta para promover políticas y prácticas culturales que contribuyan a los ODS y que garanticen que la cultura sea una prioridad en la agenda global.
Los Objetivos 2030 para la cultura se dividen en siete áreas temáticas:
- La cultura y la economía: promover la cultura como sector estratégico y generar empleo y riqueza a través de la cultura y las industrias creativas.
- La cultura y el medio ambiente: promover la cultura como catalizador de la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático.
- La cultura y la inclusión social: promover la cultura como herramienta para la inclusión y la cohesión social, y garantizar el acceso a la cultura para todos.
- La cultura y el diálogo intercultural: promover la cultura como herramienta para el diálogo y la comprensión entre las culturas y las comunidades.
- La cultura y la educación: promover la cultura como herramienta para la educación y la formación, y garantizar que la cultura sea parte del currículo escolar.
- La cultura y la igualdad de género: promover la cultura como herramienta para la igualdad de género y la eliminación de la discriminación de género en la cultura.
- La cultura y el desarrollo urbano sostenible: promover la cultura como herramienta para el desarrollo sostenible de las ciudades y los territorios.
Objetivos específicos de los ODS 2030 en los que participa la cultura
Aumentar la participación cultural
Los objetivos 2030 buscan fomentar la participación en actividades culturales en todos los sectores de la sociedad. Esto incluye el fomento de la creación artística y cultural, la promoción de la diversidad cultural y el patrimonio, y el fortalecimiento de las organizaciones culturales y las comunidades locales.
Promover la educación y la formación en cultura
Uno de los objetivos principales de los objetivos 2030 es promover el aprendizaje y la formación en cultura, para mejorar la comprensión y apreciación de la cultura. Esto incluye el fomento de la educación y la formación en las artes, la cultura y el patrimonio, y la promoción de la creatividad y la innovación.
Mejorar la accesibilidad:
El acceso universal a la cultura es otro objetivo clave de los objetivos 2030. Esto incluye el fomento de políticas y programas para mejorar el acceso a la cultura y las artes, así como para mejorar la accesibilidad para las personas con discapacidades.
Promover la igualdad de género:
Los objetivos 2030 también buscan abordar la desigualdad de género en la cultura y las artes. Esto incluye el fomento de la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres en la creación artística y cultural, y la promoción de la diversidad y la igualdad en la representación cultural.
Fomentar la innovación y la creatividad
La innovación y la creatividad son esenciales para el desarrollo cultural sostenible. Los objetivos 2030 buscan fomentar la innovación y la creatividad en la cultura y las artes, y apoyar la creación de nuevas formas de expresión y participación cultural.
Fortalecer la cooperación internacional
La cooperación internacional es esencial para el desarrollo cultural sostenible. Los objetivos 2030 buscan fomentar la cooperación entre países en el ámbito de la cultura y las artes, para promover el intercambio y la comprensión intercultural.
Fomentar la sostenibilidad
La sostenibilidad es un objetivo clave de los objetivos 2030 para la cultura. Esto incluye el fomento de la sostenibilidad ambiental, social y económica en la cultura y las artes, y la promoción de prácticas culturales y artísticas sostenibles en todas las áreas de la sociedad.